Imagínate que existe un banco que cada mañana acredita en tu cuenta la suma de 86.400 euros. Ese extraño banco no arrastra tu saldo día a día: cada noche borra todo el saldo que no has gastado durante la jornada, cualquiera sea la cantidad. ¿Que harías? ¡Retirar hasta el último céntimo, por supuesto! Cada uno de nosotros tiene ese banco, su nombre es tiempo. Cada mañana, este banco te acredita 86.400 segundos. Cada noche este banco borra y da como perdida toda la cantidad de ese crédito que no hayas invertido en un buen propósito. Ese banco no arrastra saldos ni permite sobregiros. Cada día te abre una nueva cuenta, cada noche elimina los saldos del día. Si no usas tus depósitos, la perdida es tuya. No se puede dar marcha atrás ni existen los giros a cuenta del deposito de mañana. Debes vivir el presente con los depósitos de hoy. Invierte de tal manera de conseguir lo mejor en salud, felicidad y éxito. El reloj sigue su marcha. Consigue lo máximo en el día. Para entender el valor de un año, pregúntale a algún estudiante que perdió el año de estudios. Para entender el valor de un mes, pregúntale a una madre que alumbro a un bebe prematuro. Para entender el valor de una semana, pregúntale al editor de un semanario. Para entender el valor de una hora, pregúntales a los amantes que esperan a encontrarse. Para entender el valor de un minuto, pregúntale al viajero que perdió el tren. Para entender el valor de un segundo, pregúntale a una persona que con las justas evito un accidente. Para entender el valor de una milésima de segundo, pregúntale al deportista que ganó una medalla de plata en las olimpiadas. Recuerda que el tiempo no espera por nadie y atesora cada momento que vivas. 

Soy demasiado débil. Demasiado lento. Demasiado grande. Comí mucho en el desayuno. Me duele la cabeza. Está lloviendo. Mi perro está enfermo. No puedo ahora mismo. No estoy inspirado. Huelo mal. Soy alérgico a estas cosas. Soy gordo. Soy flaco. Hace mucho calor. Tengo razón. Hace que me duela el brazo. La cabeza. Estoy distraído. Tengo muchas cosas que hacer. Me encantaría, en serio, pero no puedo. Están poniendo mi serie favorita. Tengo que hacer el lunes... el martes... el miércoles... No quiero hacer esto, quiero hacer algo más. El próximo año. La semana que viene. Estoy cometiendo un error. Tengo deberes que hacer. Estoy cansado. Es un día complicado. Mi entrenador me odia. Mi madre no me deja. Me lastimo fácilmente. Está muy oscuro. Hace frío. Me duele. Esto es peligroso. Lo siento, pero no tengo una bicicleta. No he dormido lo suficiente. No he dormido bien. No quiero parecer cansado ahora. Necesito un mejor entrenador. Me duele el estomago. No soy un tipo atlético. No quiero sudar. Tengo mejores cosas que hacer. No quiero caerme. ¿Tengo que hacer esto? Debería ser promocionado. Y me duelen los pies.

SIN EXCUSAS.

Caos.

Hoy estoy en uno de esos días en los que es necesario escribir para vaciar el alma. En cuanto al título, no hay ninguna palabra de las 300.000 ó 400.000 de la lengua española que sea más acertada y que explique mejor mi situación por muy rebuscada o especializada en su ámbito que sea. El desanimo, el desasosiego y la apatía, arañas silenciosas, se han apoderado de mí y tejen su tela en todos los rincones.

Mientras pisoteo las teclas con mis dedos no puedo parar de pensar en lo que soy, en lo que me he convertido y en lo que deseo llegar a ser y cuán larga debe ser la distancia que separa estas diferencias. Además, me cercioro de algo de lo que ya tenía consciencia: lo cierto es que no estoy en un 'mal día', simplemente. No, esto no es así. Ojalá fuera todo tan sencillo. Ojalá pudiera irme a dormir con la certeza de que al día siguiente me voy a levantar y nada va a ser de la misma forma, como la gente normal, pero no es algo que se vaya a ir por sí solo, sin más.

Hay una técnica psicológica que se basa en la escritura de cualquier pensamiento y/o sentimiento que le venga a la mente al sujeto durante 15 minutos para aportar claridad. Estoy comprobando sus beneficios ahora mismo.

Racionalizando paulatinamente a través de este (largo o corto, según como se mire) mes, he llegado a una nueva conclusión que se me había escapado en mi últimamente débil proceso de introspección y que ha sido lo mismo que he dicho en la sala de visita de la Dra. J.: estoy evadida de la realidad. La imaginación -porque lo contrario a la realidad tampoco podría ser llamado irrealidad, puesto que de cierto modo por más que me empeñe no puedo escapar de la verdad- es más cómoda, sencilla y gratificante. La realidad, en cambio, me parece muy asfixiante y agotadora. Siempre que puedo (e incluso más) escapo de mi propia realización personal hasta llegar a un mundo absorbente del cual me es cada vez más complicado y angustioso salir.

Hace unos días leí en el libro de Nación Prozac una quote de Heráclito que me parece muy oportuna debido a mi conclusión anterior y que he reinterpretado subjetivamente a mi manera. La frase dice así: "¿Cómo puedes escapar de lo que nunca se desvanece?"

¿Cómo puedo evadirme de la realidad si siempre está ahí? ¿CÓMO? Es simple y llanamente imposible.

Me encuentro desarrollando lo que podríamos llamar una bulimia positiva. Al igual que pueden llegar a existir connotaciones positivas en el racismo (véase racismo positivo), le he denominado bulimia positiva al proceso en el que convierto mis sentimientos en palabras para después plasmarlas en papel, sacarlas de mi interior y poder olvidarme de ellas y, en consecuencia, de los sentimientos que me delimitan.

Todo está fuera de control, y estoy en un estado entre asustada y confortablemente inmovilizada. Me queda todo demasiado grande y los días se suceden rápidamente mientras malgasto horas, minutos, segundos. Estoy tan confusa que no se qué pensar, qué hacer, qué escribir. Me siento perdida. Por dentro. (Y esa es, quizá, de las peores pérdidas.) Todo está hecho un caos. Antes sólo era yo, ahora es todo lo demás. He reproducido mi caótico yo en la realidad hasta dar formas físicas a mi desorden interno. El caos de mi interior se está trasladando y plasmando en mi vida. 

Todo es un caos. CAOS. CAOS. CAOS.

"La vida es como una bicicleta. Si quieres mantener el equilibrio no puedes parar." Pese a todo, he de seguir adelante. No tengo tiempo ni de pararme a pensar si realmente puedo -me atrevo-, simplemente tengo que seguir adelante. Empezar supongo que es lo más difícil, lo demás irá todo rodado. 

Qué vértigo me da todo.

“How can you hide from what never goes away?” 

― Heraclitus.

harte.

American Beauty.

"No sé si Alan Ball y Sam Mendes son conscientes de la profundidad analítica y la belleza infinita que lograron plasmar con esta película, y la cantidad de vidas que cambiaron gracias a ella."

30 cosas que hacen que la vida valga la pena.

1. - La música. Desde El hada de azúcar de Tchaikovsky hasta el Smells like teen spirit de Nirvana, pasando por My heart belongs to Daddy, la música de las viejas películas de Disney y El tema de Tara de la banda sonora de Lo que el viento de llevó.
2. - El amor (en cualquiera de sus variantes y/o formas).
3. - Ayudar a alguien en necesidad.
4. - El éxito.
5. - Aprender algo nuevo.
6. - Enamorar(se).
7. - La lluvia.
8. - Reír.
9. - Las nubes.
10. - Las palabrotas.
11. - Viajar.
12. - El chocolate.
13. - Los besos (de él).
14. - Los sueños por cumplir.
15. - Un "te quiero".
16. - Sentir la brisa del mar.
17. - Las siestas.
18. - Las mariposas en el estómago.
19. - Las sorpresas.
20. - Un sábado noche de los que no se olvidan.
21. - Que jueguen con tu pelo.
22. - Los columpios.
23. - La playa.
24. -Descubrir a qué huelen las casas de tus amigos al entrar por la puerta.
25. - El sexo.
26. - Coleccionar recuerdos.
27. - Soñar despierto.
28. - El cine. Rebeca de Alfred Hitchcock, Lo que el viento se llevó, Annie Hall de Woody Allen, Pulp Fiction de Tarantino, La lista de Schindler de Spielberg, Forrest Gump, Amelie y, sobre todo, American Beauty de entre un largo etcétera.
29. - La literatura. Nación Prozac de Elizabeth Wurtzel, Tus zonas erróneas de Wayne Dyer, los libros de Harry Potter, El niño con el pijama de rayas, Madame Bovary de Flaubert, entre otro gran largo etcétera.
30. - (No) Crecer.

MM.

Norma Jean Baker (también conocida como Marilyn Monroe.)
"Pocas veces un espíritu tan alegre ha sido tan cruelmente silenciado" D. S.

“El no ser perfecta, me hiere”, escribió Sylvia Plath en su Diario en 1957.

Ausencia. (de ti)

50 cosas que quiero/voy a hacer antes de morir.

1. - Viajar. Viajar muchísimo. A todos y cada uno de los cinco continentes. Visitar todas (o casi todas, al menos) las maravillas del mundo. Y no sólo viajar, sino también absorber e impregnarme de los conocimientos y costumbres de otras culturas.
2. - Leer. Leer mucho y tanto como pueda. Leer clásicos. Leer aquellos libros que están considerados como paradigma de la esencia del ser humano.
3. - Montar a caballo.
4. - Trabajar en algo que me guste, me apasione, me complete y me enriquezca como persona.
5. - Dejar que otras personas me aporten sus conocimientos y me inspiren y hacerles saber cuán importantes han sido para mí y cuanto me han influenciado.
6. - Inspirar (a otras personas).
7. - Hacer paracaidismo.
8. - Ayudar a alguien (en algo importante) sin esperar nada a cambio y hacerlo por simple placer.
9. - Escribir un libro.
10. - Hacer labor humanitaria.
11. - Ver la puesta de sol con alguien especial.
12. - Ver el amanecer con alguien muy especial.
13. - Ver un eclipse solar.
14. - Ver la aurora boreal.
15. - Tener una cita a ciegas.
16. - Hacer las maletas y marcharme a algún lugar aleatorio sin un itinerario planeado.
17. - Vivir en un país diferente durante al menos seis meses.
18. - Aparecer en el periódico/la radio/ la televisión por un éxito del cual estoy orgullosa.
18. - Vivir en la casa de mis sueños.
19. - Ver nieve.
20. - Hacer volar una cometa.
21. - Ir a Disneylandia.
22. - Vencer mis miedos.
23. - Hacer buceo y experimentar la vida marina y ver el océano desde dentro.
24. - Animar a otras personas a que hagan su lista de "cosas que hacer antes de morir" y que la cumpla.
25. - Probar la meditación y el yoga.
26. - Luchar por lo que verdaderamente creo.
27. - Conseguir poner punto y final a todas las heridas, quejas e infelicidad del pasado.
28. - Hacer algo alocado y totalmente fuera de sentido común simplemente porque me apetece, sin más.
29. - Hacerle saber a todo el mundo que quiero que les quiero.
30. - Hacer un crucero.
31. - Enamorarme.
32. - Enamorar.
33. - Perecer sabiendo que he disfrutado de la vida e intentar no desperdiciar ningún día de mi existencia a partir de este mismo instante.
34. - Escribirme una carta a mí misma y releerla años después.
35. - Ver películas. Muchas, muchas películas. Ver las mejores películas de la historia del cine.
36. - Tomar fotos. Muchas, muchas fotos. Capturar instantes (¿importantes?) de mi vida con el opturador de mi cámara para congelarlos y poder revivir esos momentos en un futuro.
37. - Aprender algo nuevo cada día.
38. - Dejar de ser influenciada por esta sociedad que se empeña en hacer de todos un mismo ser.
39. - Bailar bajo la lluvia.
40. - Besar bajo la lluvia.
41. - Dormir en la yerba bajo las estrellas.
42. - Dejar de ser una postergadora nata.
43. - Llegar a ser la verdadera dueña de mi vida.
44. - Encontrar alguien a quien ame y pasar con él el resto de mi existencia.
45. - Apreciarme por cómo realmente soy.
46. - Explorar mi espiritualidad.
47. - Que alguien me escriba una canción.
48. - Ser lo suficientemente rica como para poder mandar a todo el mundo al diablo.
49. - Agradecer(le) y devolver(le) a mi madre todo lo que ha hecho por mí.
50. - Y, ante todo: ser muy, muy feliz. Ser tan feliz que cuando muera mis partículas se descompongan y propagen felicidad por doquier.

No te digas a ti mismo cuán grandes son tus problemas, dite a ti mismo cuán grande eres TÚ.

"Hola, soy un tío, ahora te quiero, ahora te odio, ahora te clavo un cuchillo y ahora llamo a una ambulancia para que no te desangres." 

Fuente: https://twitter.com/#!/PatriPsycho

Haz tu lista de cosas por las que merece la pena vivir, y añádele al final las películas de Woody Allen.

Malta.

<< La regla es, mermelada mañana, y mermelada ayer... pero nunca mermelada hoy.>>

<< Alguna vez tiene que ser "mermerlada hoy día.">> objetó Alicia.

-Alicia en el país de las maravillas, Lewis Carrol.-

La vida.

• • "jaflijbafkjlbjklñfb
  • Vale
  • Joder
  • Que ADV.
  • em
  • a ver
  • ¿Si a mí me ha pasado que he estado decepcionando a la gente constantemente y sobretodo a mí?
  • ¡Claramente sí!
  • Supongo que sería porque me exigían, y en consecuencia, yo me exigía también a mí mismo bastante más de lo que podía abarcar.
  • Pero todo se soluciona.
  • Supongo que tu caso, al igual que todos, será el siguiente: Los demás te ven como ellos quieren verte y no como realmente eres.
  • Todos tenemos nuestros puntos fuertes y nuestros puntos débiles.
  • Y no somos perfectos.
  • Eso bórratelo de la cabeza si aun tenías presente ese mito.
  • La perfección humana no existe."
    
    
• 
  

  [...]

  
  

  
  
  

  • "Todos somos buenos, amables, honestos y mil cosas más
  • Pero todo tiene un límite.
    • Incluso ocurre a la inversa: podemos llegar a ser mezquinos, soeces, hipócritas (que a mi pensar lo somos todos) y más cosas
    • pero todo eso no nos define en absoluto
      • Simplemente, el conjunto de todo eso, de nuestras decisiones como entes humanos que somos, nos define.
      • Incluso puede que ni eso.
      • No soy yo nadie tampoco para decirte todas estas cosas.
      • Pero mi creencia es que los demás tienen unas espectativas de nosotros muy equivocadas.
      • Y, claramente, eso recae también en nuestra forma de pensar.
      • Al final, nosotros también terminaremos pensando igual.
      • Actualmente, se piensa más colectivamente que individualmente."
        
        
        [...]
        
        
        • "Yo soy ególatra, y me acepto como tal.
        • Ésa es una de las bases de la felicidad.
        • Creo que ya te lo dije hace tiempo.
        • Pero son tres fases: Reconocerlo, aceptarte y, después, amarte.
          • • Es un largo camino, pero vale absolutamente la pena. Te lo digo yo." 
  
  

  Nota: esta sabiduría no es mía.
  
  

Cuando la música deja de ser sólo música y empieza a ser arte.

"A medida que crecemos nos resulta más dificil creer. No es que no queramos, sino que han ocurrido demasiadas cosas que nos lo impiden."

-Now&Then.- 

Eres los libros que has leído. Eres las películas que has visto. Eres la gente que has conocido. Eres la música que has escuchado.  Eres las fotos que has tomado. Eres las palabras que has pronunciado. Eres los lugares que has visitado. Eres los textos que has escrito. Eres los errores que has cometido. Eres las opiniones que has dado. Eres las lecciones que has aprendido. Eres los amigos a los que has ayudado, los amigos a los que has defraudado. Eres la gente a la que has admirado. Eres los monstruos contra los que has luchado. Eres las palabras que has aprendido. Eres todavía aquella niña de seis años pero que ha crecido. Eres la gente a la que has herido. Eres las maldades que has cometido. Eres tus amigos, eres tus enemigos. Eres lo que tu corazón ha añorado. Eres por quien has llorado. Eres tu amiga a quien has ayudado. Eres las palabras que no has pronunciado. Eres todo lo bueno, eres todo lo malo. Eres blanco y negro (y gris). Eres lo que crees, eres lo que sueñas. Eres lo que has hecho, lo que has dicho. Eres lo que no has hecho, lo que no has dicho. Eres todo lo que te ha inspirado. Eres todo lo que has creado. Eres todo lo que tu mente ha pensado.

Queda prohibido [...] no comprender que lo que la vida te da, también te lo quita.

-Pablo Neruda (?)-

SKYSCRAPER.

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Un, dos, tres... ¡Probando!

Foto: Marina Torres.

Hola, me llamo Helena y a veces me odio.